En un comunicado, Cáritas señala que la tercera reforma de la Ley de Extranjería amenaza los derechos fundamentales de los inmigrantes, que "son anteriores al propio estatuto de ciudadaní".

Por ello, el Consejo General de la organización católica ha señalado la urgencia de abordar la realidad de la inmigración en nuestro país con respuestas que vayan más allá de los meros aspectos legales.

En primer lugar, es necesario dejar de hablar de extranjería para hacerlo de migración e integración, y comenzar a trabajar en una política de Estado que incorpore elementos que nunca han sido contemplados en ninguna de las normas legales que se han sucedido en los últimos años.

"Sólo dareos respuestas sólidas y fiables a los retos que plantea la inmigración en la medida en que se preste atención a sus causas", añade Cáritas.

Para ello, además de una profunda revisión de las políticas en materia de deuda externa, de comercio exterior y de cooperación internacional, Cáritas propone realizar un esfuerzo mucho mayor en los recursos destinados a favorecer la integración en los campos educativos, laborales, sanitarios y comunitarios,