Interior incluye en la documentación aportada detalles de horarios, número de inmigrantes, nacionalidades y servicios prestados a cada uno de ellos.

En este sentido, el informe explica que el grupo de extranjeros estaba formado por ciudadanos de diversos orígenes, procedentes de países situados al sur de Marruecos y Argelia, fundamentalmente.

Las personas expulsadas mediante resolución de expulsión del delegado del Gobierno de Melilla con echa 19 de junio son un total de 58, cuyos nombres y país de origen se incluyen en el informe entregado al Defensor del Pueblo, mientras que los inmigrantes objeto de devolución mediante resolución del propio delegado suman 44.

A todos ellos hay que añadir a un inmigrante ilegal sobre el que pesaba una resolución de 12 de enero de este año del Gobierno Civil de Málaga, que se añadió a los grupos anteriores.

La información enviada a Alvarez de Miranda, dice que el juzgado de Instrucción número 2 d Melilla autorizó el internamiento mediante auto de 20 de junio. A raiz de ello, a partir del 21 de junio, a las 1,30 horas, comenzaron a llegar a Málaga los ciudadanos subsaharianos protagonistas de los incidentes anteriormente citados.

En los tres centros de internamiento de Málaga donde fueron alojados los inmigrantes en distintos grupos se contrató servicio adicional de limpieza, se distribuyeron a su llegada bolsas de comida, se facilitó material de aseo personal. Posteriormente, les fueron entreadas prendas de ropa, así como balones para jugar a baloncesto dentro de un polideportivo

Hubo, además, cuatro extranjeros trasladados por la Guardia Civil al centro médico sin que se les diagnosticara padecimiento alguno.

Por último, a partir de las siete de la mañana del pasado día 22 de junio todos los extranjeros fueron agrupados en la base aérea de Málaga, desde donde salieron hacia sus lugares de destino entre las 9 y las 10 de la mañana, acompañados siempre por funcionarios del Cuerpo Nacinal de Policía.

ORIGEN DE LOS SUCESOS

En la documentación aportada al Defensor del Pueblo, el Ministerio del Interior relata los antecedentes de los últimos sucesos. En mayo de este año se encontraban en Melilla un grupo aproximado de 130 ciudadanos subsaharianos, atendidos por 'Melilla Acoge', en el antiguo balneario 'Lucas Lorenzo', que fue destruído e incendiado por ellos, por lo que fueron trasladados posteriormente al antiguo hospital de la Cruz Roja, así como a las dependencias deportivas 'Alvrez Calero'.

En la información se afirma también que el 16 de junio fue solicitada la intervención de la Policía por los responsables de la Cruz Roja, como consecuencia de una agresión con arma blanca por parte de un ciudadano nigeriano contra dos compatriotas suyos. Los miembros de la dotación policial fueron agredidos con piedras y otros objetos.

El 17 de junio, un grupo aproximado de cuarenta de estos extranjeros se dirigió en actitud violenta a las puertas del edificio de la Delegación del Goierno. El propio delegado mantuvo una entrevista con ellos, pero no depusieron su actitud y al día siguiente otro grupo próximo a los cuarenta inmigrantes se sumó a los anteriores, que mantenían actitud amenazante ante la Delegación, según Interior.

Ante esta situación, se procede a la detención de los extranjeros, lo que da lugar a su expulsión, con autorización judicial de internamiento, o a su devolución.