Así se expresó Iranzo en la presentación del primer Informe del Observatorio de la Empresa Multinacional Española (OEME), estudio realizado por el ICEX y Esade con la colaboración de la Fundación Cultural Banesto y la Fundación PricewaterhouseCoopers.

Con respecto al informe, Iranzo indicó que "la rapidez con que se ha desarrollado este proceso y la importancia que tiene para nuestra economía hacía necesario un estudio en profundidad de los factores que determinan la transición desde la condición de empresa inversora en el exterior a la de empresa multinacional, así como de aquellos elementos que pueden determinar el éxito o el fracaso de las estrategias de multinacionalización de las empresas españolas".

Desde 1997, las salidas de inversión directa extranjera superan a las entradas, es decir, España lleva ya más de una década siendo inversor neto en el exterior, ocupando en la actualidad la quinta posición en el ranking de países inversores a nivel mundial.

En este sentido, Iranzo manifestó que "en los últimos años, la diversificación tanto geográfica como sectorial ha sido quizá el rasgo más característico de nuestras inversiones, un proceso cada vez más sofisticado en el que los apoyos que otorga la Administración Comercial deben evolucionar y adaptarse a las necesidades cambiantes de las empresas".

Una de las principales conclusiones del informe es que a pesar de los problemas que está planteando la actual crisis económica el elevado grado de internacionalización alcanzado por un buen número de grandes empresas españolas es hoy ya una fortaleza y no una debilidad a la hora de hacer frente a la crisis.

Asimismo, el estudio señala que es previsible que en los próximos años el número de empresas españolas que pueden optar por la internacionalización se incremente.

Por sectores, la distribución de la inversión española de origen empresarial presenta globalmente un fuerte predominio del sector servicios, tanto en el sector de la banca, seguros, y la intermediación financiera, como las telecomunicaciones.

A bastante distancia están los sectores de la producción y distribución de electricidad, agua y gas, las actividades inmobiliarias y los servicios a las empresas, el comercio, la hostelería y los transportes.