Según las Cámaras, las rebajas han permitido bajar los precios un 0,7% en julio, siendo de nuevo elementos coyunturales, estacionales y ajenos a la economía española los que han permitido ese buen comportamiento. Sin embargo, lamentan que la subida de precios de los carburantes y del sector turístico y hotelero hayan provocado que la inflación interanual (la de los últimos doce meses) se mantenga en el 3,4%.

A su juicio, la generalización de la campaña de rebajas debería conseguir, "siempre que los precios turísticos lo permitan", una mayor moderación de la tasa interanual en los próximos meses. No obstante, las Cámaras advierten de que esta cotención del IPC podría verse truncada en la última parte del año si la actividad económica empieza a mostrar mayor vigor y se agotan los efectos positivos que han afectado puntualmente a la inflación.