Meyer afirmó que en relación con el gasto "hay una pequeña trampa interesada" por parte del Ministerio Defensa que explicó así: En la actualidad, el gasto militar en el PIB alcanza el 1,1%, pero no incluye ni los organismos autónomos, ni la Guardia Civil, ni toda la industria civil y militar.

Al respecto, si se sumaran todos estos conceptos el gasto ascendería al 2,1% del PIB, cifra que se duplicaría con la propuesta de modelo de profesionalización de las FAS situaría el gasto tota en el 4% del PIB".

Meyer indicó que "si para alcanzar el objetivo de profesionalización hay que duplicar el gasto de Defensa, lo que se gana por un lado se pierde por otro".

En declaraciones a varios medios, el portavoz de Defensa de IU avanzó las primeras consideraciones que hace su grupo de los primeros trabajos realizados por la Comisión Mixta Congreso-Senado sobre la profesionalización de las FAS.

El portavoz de IU defiende un modelo de seguridad compartida y un tamaño de ejército profeional "sensiblemente menor" al que baraja el Ministerio de Defensa (entre 100.000 y 130.000 soldados).

A su juicio, "hay que cambiar de forma radical la opacidad que existe en la sociedad española sobre las decisiones de Defensa. Hasta ahora, todos los debates sobre Defensa Nacional se circunscriben sólo a profesionales y al Gobierno". En este sentido indicó que "hay que introducir un cambio legislativo que permita que sea el Congreso quien fije los criterios de la Defensa Nacional".

Meyer exigió"una ruptura con los modelos anteriores de Defensa, que permitan seguir la evolución en el seno de la UE de reducir el número de efectivos humanos".

En este sentido, sobre la consideración de que en el continente europeo hay seis millones de soldados con un gasto de 160.000 millones dólares, "el nuevo modelo requeriría un efectivo de tan sólo 500.000 hombres y mujeres armados, suficientes para garantizar las necesidades de seguridad", en su opinión.

En cuanto a las misiones de paz, Meyer afirmó qe "hay un despite internacional". Para corregir eso, "la novedad sería que cada gobierno europeo contribuyera con una fuerza de paz que sumaría en total 5.000 soldados formados específicamente para dichas tareas".

Asimismo, IU propondrá un debate sobre la reconversion de la industria armamentística española para que no afecte a los puestos de trabajo ni a las economías de las regiones donde se ubican las empresas.