Todos sus portavoces tuvieron algunos elementos comunes, más diferencias propias del talante y territorialidad de los respectivos partidos, en sus intervenciones en la comparecencia de Sánchez en la Cámara Alta para exponer sus medidas para mitigar los efectos de la crisis por la guerra en Ucrania.

Carles Mulet, de Compromís, criticó la “doble categoría” de Sánchez al contestar más al PP que al resto de grupos, y su doble rasero por querer proteger Doñana pero facilitar la ampliación del puerto de Valencia. También se quejó de que las viviendas de la Sareb las tengan que comprar las comunidades autónomas y pidió al Gobierno que sufrague la supuesta deuda histórica que padece la Comunidad Valenciana.

Pablo Gómez Perpinyà, de Más Madrid, echó en cara a Sánchez su “claudicación” ante Marruecos traicionando al Sahara y su pacto con el PP para reformar la ley ‘del sólo sí es sí’, y preguntó por qué han tardado tanto en aprobar la Ley de Vivienda. Además, le emplazó a seguirse exigiendo mutuamente cumplimientos como gobiernos, central y autonómico, dando por hecho que Más Madrid ganará las elecciones de mayo en su comunidad.

Koldo Martínez, de Geroa Bai, quiso recordar que él ya pidió hace años en el Senado destinar a alquiler social las viviendas de la Sareb, y que Sánchez lo catalogó de imposible. Además, recriminó que en la Ley de Vivienda se reduzca a “coyunturales” las medidas en la materia de comunidades autónomas.

Viçens Vidal, de Mes por Mallorca, reclamó cumplimiento de las leyes autonómicas y la gestión del aeropuerto de Palma, y facilitar que sean las propias comunidades autónomas, en el ejercicio de sus competencias, las que regulen el precio de alquiler y se enfrenten a los pisos turísticos.

Finalmente, Fabián Chinea, de la Agrupación Socialista Gomera, denunció que el Gobierno ha fallado a muchas personas por la mala gestión de la concesión de ayudas, con grandes colas en las sucursales de la Seguridad Social. Valoró el intento de reducir el IVA en los precios de la Península, pero pidió que haya una ayuda paralela a Canarias, donde no se paga dicho impuesto.