Según informó la RACMyP, al acto asistieron, entre otras autoridades, Camilo Villarino, nuevo jefe de la Casa del Rey; el Jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Teodoro Esteban López Calderón; Amparo Valcarce, secretaria de Estado del Ministerio de Defensa; Esperanza Casteleiro, secretaria de Estado Directora del CNI; el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, y académicos de distintas reales academias. El general Enseñat ostentará la medalla que tenía el fallecido teniente general Muñoz-Grandes, cuya viuda asistió el acto.

Benigno Pendás, presidente de la RACMyP, integrada en el Instituto de España, destacó que el ingreso del JEME continúa la tradición de que sea miembro de esta Real Academia un militar de alta graduación y supone además “un reconocimiento a la función constitucional de las Fuerzas Armadas, que cumplen de forma ejemplar”.

En especial, añadió Pendás, la sociedad española se siente orgullosa del brillante papel que desempeñan en las misiones en el extranjero, junto con los socios en el mundo internacional, siempre en defensa de la libertad y los derechos humanos. “Contribuye así nuestra Academia a la cultura de la Defensa, propia de las democracias avanzadas. La actividad del nuevo académico será sin duda muy positiva para nuestros estudios y debates al servicio del interés general”, recalcó el presidente de la citada Real Academia.

El discurso de ingreso del general Enseñat versó sobre 'La transformación de las Fuerzas Armadas Españolas: modernidad y tradición', de cómo las Fuerzas Armadas “se han transformado” para adaptarse a los cambios, “incrementando su disponibilidad y capacidad para cumplir con su misión, y, al mismo tiempo, conservando lo esencial de su código moral, los valores en que se basa su proceder”. La contestación a su discurso la realizó el académico de número de la RACMyP José María Serrano Sanz.

El nuevo académico aludió a tres aspectos esenciales: la incorporación de la mujer a las Fuerzas Armadas, la plena profesionalización y la enseñanza militar.

INCORPORACIÓN DE LA MUJER

En este sentido, el general Enseñat señaló que, en comparación con los países del entorno, España llegó tarde, hace 35 años, a la incorporación de la mujer a las Fuerzas Armadas, “pero en muy poco tiempo se eliminó todo tipo de discriminación, permitiéndose alcanzar todos los empleos militares y ocupar cualquier destino y estableciéndose instrumentos para verificar la igualdad efectiva entre mujeres y hombres y facilitar la conciliación personal, familiar y profesional”.

De hecho, añadió, en la actualidad, “España es una referencia en la igualdad e integración de las mujeres en sus Fuerzas Armadas y en la implantación de las resoluciones de Naciones Unidas sobre Mujeres, Paz y Seguridad”.

Fue en este punto cuando aludió al ingreso como como dama cadete de la Academia General Militar de Zaragoza de la princesa Leonor, llamada a ejercer en un futuro el Mando Supremo de las Fuerzas Armadas. Esta circunstancia, afirmó,” reviste especial simbolismo en muchos ámbitos, no siendo el menor su coincidencia con el trigésimo quinto aniversario de la incorporación de la mujer a los Ejércitos”.

GUERRA EN UCRANIA

Por otro lado, también se refirió el nuevo académico de la RACMyP en su discurso en analizar las Fuerzas Armadas en el entorno geoestratégico actual, en constante evolución. En este punto, mencionó de forma expresa la invasión de Ucrania por parte de Rusia, hace ahora dos años: “La reacción defensiva ucraniana, esta vez apoyada decididamente por Occidente, y los errores estratégicos y operacionales rusos convirtieron la ‘operación militar especial´ en un conflicto prolongado muy parecido a una guerra de desgaste que nos ha devuelto al comienzo del ciclo, a una nueva ´guerra fría más cercana a una guerra caliente”. Una invasión, incidió, que “parece que ha convencido definitivamente a los países europeos de la necesidad de invertir más en defensa”.

TRANSFORMACIÓN

La conclusión central del general Enseñat es que las Fuerzas Armadas se han transformado progresivamente para adaptarse a las consecuencias de la evolución del marco geoestratégico, jurídico, político, social y económico, algo que exigía de forma primordial su afán por estar al servicio de España y de los españoles, en eficaz cumplimiento de sus misiones y cometidos. “Las Fuerzas Armadas han sido capaces de conjugar modernidad y tradición, para convertirse en un Ejército moderno al servicio de un Estado y una sociedad democráticos, preservando lo esencial de su código moral y reafirmando los valores de la vocación y profesión militar”, recalcó.