En declaraciones a Servimedia, Martí Mingarro consideró "muy oportunos, constructivos", con mucho sentido" y llenos de sensatez" los deseos de Delgado de evitar la "desertización" de la justicia mediante el atraso de la edad de jubilación de los jueces hasta los 72 años y la reducción de dos a un año el periodo de frmación de los nuevos magistrados en la Escuela Judicial.

"Es deseable que esas medidas doten de verdad de medios a la justicia. ¿Cómo queremos luchar contra la dilación de la justicia si los órganos judiciales no están cubiertos?", se preguntó.

Confió en que estas propuestas, "dignas de estudio", sean tenidas en cuenta por el Gobierno para que se lleven a la práctica cuanto antes, ya que, agregó, "nadie padece más que nosotros los problemas derivados de la falta de plazas de los juzgados".

in embargo, Martí Mingarro explicó que son "medidas de emergencia" y lamentó que no haya un plan a medio y largo plazo que agilice los procesos judiciales.

Como plan a largo y medio plazo, propuso que se convoquen anualmente oposiciones "exigentes y de calidad" para que vayan accediendo nuevos jueces a la Administración de justicia.