En un auto notificado este martes, el magistrado indica que ese reconocimiento se hará con pleno respeto al derecho de defensa del detenido y con su previo consentimiento. Para ello, el juez oficia a la clínica forense de la Audiencia Nacional para que dos médicos realicen un examen psiquiátrico al investigado.

En su resolución, el magistrado acuerda también una serie de diligencias como solicitar la remisión del informe médico forense de la autopsia realizada al sacristán asesinado y la citación como testigos de 16 personas, entre ellas las que resultaron heridas en el ataque, a quienes se les realizará el ofrecimiento de acciones como perjudicados.

Kanjaa pasó a disposición judicial el pasado lunes y el magistrado le envió a prisión provisional. La causa está secreta, pero fuentes jurídicas explicaron que el detenido respondió a las preguntas que se le plantearon en esa comparecencia. El investigado está acusado de un delito de asesinato terrorista y de otro de delito de lesiones terroristas.

Kanjaa fue detenido el pasado miércoles por el atentado mortal que costó la vida al sacristán Diego Valencia y causó heridas graves al sacerdote Antonio Rodríguez Lucena en Algeciras (Cádiz). El hombre estaba ilegalmente en España y había un expediente de expulsión abierto en su contra. Las autoridades marroquíes han indicado que había estado en tratamiento psiquiátrico en Tánger, razón por la cual el juez pide ahora informe de imputabilidad tras la valoración de su situación mental.