Lo hicieron en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas (Madrid) coincidiendo con la concentración del combinado nacional femenino para jugar los partidos de la UEFA Nations League que le enfrentarán a Italia y Suiza.

Tras la firma de la entente, Víctor Francos destacó que “entre adultos hemos sabido dar respuesta y dialogar, pactar”, y subrayó que con el pacto “se inicia un camino, no culmina nada”. Explicó que el documento firmado habilita al Gobierno como “mediador”, como “punto de encuentro”, puesto que “las selecciones nacionales son competencia de las federaciones nacionales”.

Esto le sirvió para atestiguar que este acuerdo auspiciará una época de “cambios” con el objetivo de que “no nos volvamos a encontrar en la desagradable situación de hace unas semanas”. Por ello, agradeció a quienes han hecho posible el entendimiento, especialmente a las jugadoras, a las que ensalzó su “actitud”, su “compromiso con el escudo, con la selección”.

También elogió que hayan sido “valientes para decir 'basta', para decir 'queremos negociar', para decir 'sabemos pactar', para decir 'queremos pactar', para decir 'queremos caminar juntos'”.

Víctor Francos terminó su intervención trasladando a las futbolistas que “nos tenéis al lado” y “estaremos a vuestro lado para lo que necesitéis siempre”.

Por su parte, Pedro Rocha consideró que el de hoy constituye un “día muy importante para todos nosotros” en el que se pone de manifiesto que “se ha escuchado a este equipo” y que se está “tratando de solucionar todo” tras el beso no consentido que Luis Rubiales propinó a Jennifer Hermoso tras la final del Mundial.

En ese sentido, dejó claro que “la RFEF tiene abierta las puertas para todos los problemas que puedan existir” y lamentó que el ‘caso Rubiales’ haya impedido celebrar el triunfo mundial como “era debido”.

Luego de recordar los triunfos de la welección en los partidos contra Suecia e Italia del pasado mes de septiembre, los cuales se produjeron en “momentos tremendamente complicados”, se dirigió a Jennifer Hermoso, que regresó a la convocatoria tras el Mundial.

Dijo ser consciente de que “lo ha pasado mal” y se puso a su disposición para todo aquello que necesite. A continuación, reclamó a los presentes un aplauso “porque se lo merece”.

Por su parte, reconoció que “la RFEF tiene otra forma de ver las cosas desde que ha pasado este acontecimiento” -fórmula que empleó para referirse al ‘caso Rubiales’- y ratificó su compromiso de “tender puentes, abrir la RFEF, trabajar con estabilidad” tras los "momentos difíciles vividos”.

Por último, aseveró que el Mundial 2030 que España coorganizará con Portugal y Marruecos obliga a que la imagen del fútbol español sea “totalmente de unidad”. “Para eso trabajaremos de inmediato”, concluyó.