Así lo indicó Rius en sus redes sociales, después de que la consejera de la Presidencia del Govern, Laura Vilagrà, explicara que no se trata de un “traspaso”, sino de una “delegación”, pero sobre la que no hay detalles al respecto, después de mantener anoche una conversación telefónica con el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños.

Rius recordó que ERC “ya votó en contra” de asumir estas competencias en el debate de política general celebrado durante el pasado mes de septiembre. En este sentido, el portavoz de Junts aseguró que “renunciar” a las competencias en materia de inmigración es “renunciar a gobernar”.

Sobre este aspecto se pronunció también Vilagrà, quien aclaró que la propuesta que hizo Junts durante el debate de política general solo fue apoyada por este partido y contó con el rechazo del resto. La consejera de la Presidencia explicó que ERC no la apoyó porque “vinculaba inmigración con inseguridad”.

Asimismo, en unas declaraciones facilitadas por Junts, Rius puso en valor que su partido pactó la “delegación integral” de las competencias en inmigración a través del artículo 150.2 de la Constitución, que “ya se utilizó para atribuir a los Mossos d’Esquadra las competencias de tráfico”.

Un Govern con “vocación nacional”, comentó, tendría que “celebrar” la posibilidad de “ampliar” las competencias en materia de inmigración, algunas de las cuales “ya están reconocidas por el Estatut”.

“Somos un partido con vocación de Gobierno y con ambición de país”, aclaró Rius, quien garantizó que “nunca" renunciará a tener “más capacidad” y no le da “miedo” asumir competencias “complejas”. “No nos desentenderemos de los problemas que afectan a nuestra gente”, apuntó.