Según estos acuerdos, quienes conducen las hostilidades deben tomar todas las precauciones necesarias para respetar la vida de las personas civiles, tratar con humanidad a los capturados, asegurarse de que los heridoslos enfermos tengan acceso a la asistencia médica, proteger las instalaciones médicas y a su personal y respetar a la Cruz Roja y a su emblema.

Delegados del CICR han realizado durante la mañana de hoy visitas a los hospitales de la República Federal de Yugoslavia para evaluar sus necesidades, a fin de proveerlos del material sanitario y quirúrgico necesario para atender a las víctimas del conflicto. Cruz Roja cuenta en la zona con varios almacenes con material sanitario para este fin.

El CICR tene la intención de permanecer en la República Federal de Yugoslavia con delegados residentes en Belgrado, Pristina, Podgorica, Pec, Prizen y Berane, a fin de continuar prestando asistencia y protección a todas las víctimas.

Cruz Roja está trabajando en la zona del conflicto en la evacuación de los heridos más graves y de la población civil en las zonas más amenazadas, y realiza distribuciones de ayuda alimentaria y no alimentaria (mantas, ropa de abrigo, calzado de invierno, hornillos, lonas plástica, etc.). La organización reanudará estas actividades, suspendidas desde ayer, en cuanto cesen los bombardeos.

Por otro lado, miembros de la Federación de la Cruz Roja están preparando al personal de Cruz Roja Yugoslava para poder dar respuesta a las necesidades humanitarias que puedan surgir como resultado de los bombardeos aéreos. Paralelamente, la Cruz Roja continúa prestando asistencia a los refugiados kosovares que llegan a las distintas fronteras.

CRECE EL NUMERO DE REFUGIADOS

Según la orgnización humanitaria, las estimaciones exactas del número de refugiados que han atravesado hasta ahora las fronteras son difíciles. En la mañana de hoy, la Cruz Roja de Macedonia había censado a 11.200 refugiados kosovares y se espera la llegada de 2.000 o 3.000 más para los próximos días. Cruz Roja estima, además, que 3.000 kosovares han llegado ilegalmente a Macedonia y no han sido registrados como refugiados.

La mayoría de los refugiados están alojándose con parientes o amigos, si bien muchos de elos viven en condiciones inciertas, con capacidad limitada para ayudar a los recién llegados. Los refugiados, por consiguiente, están dirigiéndose a la Cruz Roja y otras agencias de socorro para recibir ayuda. La Cruz Roja Macedonia ha establecido equipos médicos en todos los pasos fronterizos.

En Albania, se estima que permanecen aproximadamente 18.000 refugiados de Kosovo. Por su parte, Montenegro tiene refugiadas a unas 32.000 personas procedentes de Kosovo, de las cuales 29.000 reciben ayuda de la ruz Roja. En Bosnia Herzegovina se estima que hay 10.000 refugiados kosovares.

Por otro lado, el Comité Internacional de la Cruz Roja continúa las labores de visita a prisioneros y la búsqueda de personas desaparecidas. Asimismo, la Federación Internacional de la Cruz Roja ha reforzado significativamente su presencia en los países limítrofes, como Albania y Macedonia, con la distribución de paquetes alimenticios, higiénicos y ropa de abrigo.

Según la organización humanitaria, son necesarios fondo urgentes para la compra de artículos, con el fin de distribuirlos a los refugiados de Kosovo que llegan a los distintos países. Con el fin de recaudar estos fondos, Cruz Roja Española ha abierto una cuenta en el Banco Santander.