La estación abrió hoy a las 5.30 horas y a las 10.30 horas la cola para tratar de ser reubicados en las plazas disponibles de los distintos trenes iba de punta a punta de la estación, prácticamente acababa en la calle. La gente esperaba en la cola sin tener información

El control de equipaje permanecía cerrado y eran los trabajadores los que decían la hora y el destino del tren para que fuera pasado la gente, por lo que los viajeros se iban acercando a los controles de acceso a esperar para ser llamados.

En la cola había personas que estaban de viaje laboral y algunos de ellos iniciaban ayer sus vacaciones, pero han tenido que posponerlas con la incertidumbre de saber si podrán viajar hoy en algún momento o lo tendrán que hacer otro día y buscarse un sitio para dormir.

Desde Adif comentaron que pararon la compra de nuevos billetes hasta poder reubicar a aquellos que ayer si vieron afectados por el apagón a la hora de viajar. Los trenes programados iban saliendo con normalidad, principalmente entre Madrid y Barcelona, pero algunos de ellos lo hacían con retraso.

Por su parte, Cruz Roja instaló unas carpas justo en la entrada de la estación donde ofrecían a los viajeros afectados agua, café y distintos tipos de comida para hacer más llevadera su espera. Miembros de esta ONG iban pasando por la cola para informar a los pasajeros.