Baltasar Garzón se acercó a la sala habilitada para los periodistas que informan del juicio y que está ubicada en la misma planta que su juzgado.

El juez entró y salió en varias ocasiones de la sala de prensa, ala que también acudieron los fiscales de la Audiencia Nacional Ignacio Gordillo, quien no permaneció mucho tiempo allí, y Enrique Molina, que terminó sentándose en uno de los bancos para escuchar más cómodamente las palabras de Rodríguez Galindo.

A la sala de prensa también se acercaron numerosos funcionarios, quienes incluso comentaron con los periodistas los pormenores de la declaración del general procesado por la desaparición, torturas y asesinato de José Antonio Lasa y José Ignacio Zabala en octure de 1983.