Llamazares declaró a Servimedia que, "paradójicamente, ahora que disfruta de mayoría absoluta, el PP sufre un deterioro de la credibilidad por parte del Gobierno y sus ministros, que ha obligado a una remodelación -forzada en parte por las elecciones vascas- de carácter defensivo y burocrático, que pretende solucionar cuestiones internas, más que recuperar la confianza de los ciudadanos".

Para el líder de IU, el PP no ha sabido digerir la mayoría absoluta, ha perdido la máscara centrista, ha acentuado su desconexión con la realidad y ha visto las primeras consecuencias negativas de su política, pues en la pasada legislatura contaba todavía con el beneficio de la duda y con un periodo de crecimiento económico muy amplio".

A juicio de Llamazares, se han puesto de manifiesto "las flaquezas e insensibilidad social del PP", al no saber responder a cuestiones como la subida de precios de los carburantes, la reforma de mercado laboral, la crisis de las "vacas locas", el Plan Hidrológico Nacional y la Ley de Extranjería.

En su opinión, el Gobierno del PP ha perdido también la confianza de sus electores, ya que "su estrategia centrista y sus máximas políticas moderadas se han ido en unos meses al garete, y cada vez muestra más el perfil conservador con tics autoritarios, pues no logra responder a las demandas de la sociedad ni a las contradicciones de sus políticas".