En una rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, Llamazares aseguró que "después de la política de errores del Gobierno conservador de José María Aznar, no parece que el PSOE oriente su política en sentido progresista, y tampoco de diálogo y negociación con las fuerzas de izquierdas".

Explicó que la reforma del sistema educativo es ahora "sólo del Gobierno y del PSOE", porque únicamente se ha informado a su grupo parlamentario a "grandes rasgos".

Del mismo modo, la decisión de posponer la reforma fiscal "vulnera el acuerdo de la agenda social establecido con IU- ICV" y que preveía medidas a lo largo de 2005, por lo que "queríamos haber sabido antes de que se hiciera público cuál era la voluntad del Gobierno".

Expresó su sorpresa porque esta actitud no se corresponde con la voluntad de diálogo y compromisos adquiridos, por lo que confió en que el Ejecutivo rectifique e inicie una "negociación seria" en torno a estos dos asuntos que tienen "suficiente calado para ser tratados con la mayoría de izquierdas".