En declaraciones a Servimedia, Pizcueta indicó que los establecimientos de ocio nocturno han venido realizando en los últimos años sus deberes en el proceso de ordenación del sector de manera "constante y eficaz", pero "a nivel de la Administración ha habido una inercia y un cierto abandono histórico".

A su juicio, tras la muerte del joven Álvaro Ussía el pasado fin de semana por la paliza que recibió a las puertas de la discoteca "El Balcón de Rosales", "hemos entrado en una locura de criminalización atropellada de toda la noche madrileña que no se corresponde con la realidad de los datos de la noche en Madrid como patrimonio turístico y factor de creación de empleo".

Pizcueta cree que, en lugar de entrar en esa criminalización colectiva, que considera "absolutamente desproporcionada e injusta", lo que hay que hacer es "tomar decisiones sensatas". Señaló que la aprobación de este proyecto de decreto, con la apertura del consiguiente periodo de exposición pública y debate, "es justo lo que nosotros reclamamos".

"Bienvenido sea el proceso de diálogo, pero un diálogo corresponsable", apuntó Pizcueta, en el que tienen que intervenir las tres administraciones, los establecimietnos de ocio y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, "con las que hay que extremar los mecanismos de coordinación", que, a su juicio, "no han funcionado como debieran".

Para Pizcueta, exigir una cualificación de los porteros de establecimientos de ocio nocturno y establecer un mecanismo de filtro y selección de esos profesionales, "que es el modelo empresarial que llevamos negociando con las distintas administraciones", es "una excelente noticia para que en el medio plazo y fruto del diálogo entre todas las partes tengamos en poco tiempo en Madrid un decreto para el servicio de admisión" en los locales.

En su opinión, "todo lo que suponga garantizar una homologación de este servicio, en el que el vacío que ha existido hasta estos momentos no nos ha permitido ampararnos en unos criterios objetivos para hacer esa selección de personal y para poder rechazar a determinada gente, es positivo".

Pizcueta también está de acuerdo con que los porteros no puedan ejercer las funciones de servicio de seguridad y con que los grandes locales cuenten además con seguridad privada. Aseguró que los establecimientos con un elevado aforo ya vienen trabajando con seguridad privada, y señaló que el debate puede estar en si deben tener este personal "a partir de un aforo de 500, 700 ó 1.000".

El portavoz de ECO señaló que la tragedia ocurrida el pasado fin de semana en "El Balcón de Rosales" es un hecho puntual y aseguró que los locales de ocio madrileños, que reciben 35 millones de visitas al año, son los más seguros de Europa.