La droga fue intervenida en 25 actuaciones con un saldo de 33 presuntos narcotraficantes detenidos, en todos los casos viajeros procedentes de países americanos con destino Madrid, otras ciudades españolas e incluso terceros países europeos.

En cuanto a la nacionalidad de los arrestados, el 70 por ciento eran de países centro y sudamericanos, y el resto europeos, mayoritariamente españoles. Por sexos, casi todos era hombres y las pocas mujeres detenidas iban acompañadas de varones.

Abril, con más de 36 kilos de cocaína, fue el mes en el que los servicios contra estupefacientes interceptaron más droga; seguido de junio con 34, agosto con 30 y, en orden decreciente, marzo, febrero, julio, mayo y enero.

Por lo que respecta a la forma de introducir la sustancia, además de los clásicos "culeros", que suelen ser de nacionalidad colombiana, ha sido de lo más variada e insólita: dobles fondos de maletas y equipajes en cubiertas de álbumes de fotos y carátulas de discos; en el interior de juguetes, tacones, suelas de playeras, tarros de mermelada y recipientes de cosmética.

También ha venido moldeada en forma de alubias pintas y dulces típicos colombianos. Las últimas aprehensiones se han efectuado en bandejas para servir desayunos y en botones de un vestido de novia.