Según informó a Servimedia un portavz del centro de pantallas de tráfico del Ayuntamiento, la circulación se resintió especialmente en el Paseo del Prado, a la altura de la Cuesta de Mollano, donde una balsa de agua obligó a los bomberos a cerrar dos carriles, entre ellos el "carril-bus". La zona todavía estaba señalizada hacia las cinco y media de esta tarde, debido al estrechamiento de la calzada.

En la calle Alcalá, a la altura de Cibeles, otra balsa de agua obligó a cerrar un carril, aunque pudo ser abierto de nuevo al tráfico poco espués.

La M-30 se ha visto igualmente afectada por la tromba, y registró tráfico pesado tras la tromba de granizo, sobre todo en el tramo entre el Puente de Vallecas y el Puente de Ventas en ambos sentidos.