El futuro estatuto prevé un endurecimieno de las incompatibilidades, de tal modo que el juez que abandone el Supremo para ejercer otra actividad pública o privada (excepto para ser miembro del Tribunal Constitucional, del CGPJ o de tribunales internacionales) perderá la condición de magistrado del Alto Tribunal y no podrá volver al mismo.

Asimismo, tampoco podrán compatibilizar, como hacen ahora, su trabajo en el Supremo con la docencia universitaria o la preparación de opositores a jueces.

Todos los grupos parlamentarios estuvieron deacuerdo en la pasada legislatura en la reserva de fondos para aumentar el sueldo a los magistrados, pero con la llegada del Partido Popular al Gobierno se produjo un estancamiento que provocó que a finales del pasado mes de mayo los jueces convocaran la reunión de mañana, ante un posible "bloqueo" del estatuto por parte de la nueva ministra de Justicia, Margarita Mariscal de Gante.

La ministra negó entonces que tuviera tal intención y anunció que ya había comenzado a estudiar las demandas de los magisrados del Supremo, pero hasta el momento no hay más resultados, según señalaron hoy a Servimedia fuentes de Justicia.

Las mismas fuentes señalaron que, en cualquier caso, los jueces serán los primeros en conocer las propuestas del Gobierno. Mariscal de Gante comparecerá en el Congreso para presentar las líneas políticas de su Ministerio el jueves 20, a las 16 horas.