La ronda semilla fue liderada por Cardumen Capital, con la participación de True Global Ventures (TGV). Entre los inversores ángeles de la ronda pre-seed destacan Udi Mokady, fundador y presidente ejecutivo de CyberArk; Benny Schneider; y los general partners de Rollout Ventures, Harel Prag y Amit Greener.

La plataforma de Malanta utiliza inteligencia predictiva para detectar los Indicadores de Preataque (IoPA) —las huellas digitales que los ciberdelincuentes dejan antes de atacar— y predecir cómo y cuándo serán utilizados como armas. Al recopilar señales de preataque en todo internet que revelan la actividad preparatoria de los atacantes —como nuevos registros de dominios, servidores de comando y control o kits de phishing en desarrollo, entre otros—, Malanta detiene a los “AI attackers” en la fase de preparación, antes de que el ataque se ejecute.

“Malanta ha nacido para resolver una gran brecha en la era de la IA: la ventana entre la exposición y la vulneración que se está reduciendo drásticamente”, explicó Kobi Ben Naim, cofundador y CEO de Malanta. “Hablamos con más de 70 CISOs y fundadores que nos dijeron estar saturados con entre 3 y 7 fuentes de inteligencia de amenazas, pero aún les resulta difícil operativizarlas; además, el éxito sigue midiéndose por la limpieza (MTTD/MTTR), no por la prevención. Venimos a cambiar eso.”

Malanta actúa como una capa de interrupción previa al ataque. En cuestión de minutos desde la incorporación, la plataforma mapea la huella digital de una empresa y la correlaciona con los preparativos de los “AI attackers” impulsados por IA. Posteriormente, utiliza un mapeo neuronal de exposición para clasificar las amenazas inminentes e identificar qué activos tienen mayor probabilidad de ser utilizados como armas a continuación.