Marlaska se refirió a esta cuestión en el Pleno del Congreso, donde la diputada republicana Marta Rosique le preguntó “por qué el Ministerio del Interior trata a las organizaciones que pretenden romper con el 'status quo' como organizaciones terroristas”.

Rosique aludía así a las supuestas infiltraciones de agentes en el secesionismo catalán y al caso del policía nacional al que el independentismo acusa de haber mantenido relaciones “sexual-afectivas” con mujeres de este entorno para sacarles información. Esta parlamentaria sostuvo que la Policía es “tan cutre” que los independentistas acaban descubriendo estas operaciones.

El responsable de Interior respondió a la diputada de ERC que la Policía Nacional y la Guardia Civil “son cualquier cosa menos cutre”, ya que cuentan con “auténticos profesionales” que se dedican a que los demás puedan “ejercitar sus derechos y libertades en una democracia plena como la española”.

“NO SE PERSIGUEN IDEOLOGÍAS”

Sobre las infiltraciones de agentes, Marlaska indicó que desde las Fuerzas de Seguridad del Estado “no se persiguen las ideologías”, puesto que la democracia española es considerada “no militante”, lo que implica que acepta a los que discrepan abiertamente de sus principios constitucionales.

Insistió en que los agentes dependientes del Gobierno central “únicamente están para prevenir y perseguir los delitos y en modo alguno para perseguir las ideologías, sino todo lo contrario, para defenderlas”.

Por su parte, Rosique señaló que la Policía Nacional es “tan cutre” con sus infiltraciones que “tarde o temprano” los independentistas acaban descubriéndoles. También preguntó al Gobierno “que tiene de feminista” introducir un agente encubierto en el entorno secesionista para que consiga información gracias a “relaciones sexo-afectivas”.