En una rueda de prensa en la sede de su departamento, Marlaska sostuvo que Gámez ha sido “la mejor dirigente de la Guardia Civil en los 178 años de historia” de este cuerpo de seguridad.

Según el ministro, Gámez ha sido un “ejemplo de honestidad y lealtad a unos principios” y sostuvo que su marcha es “injusta”, pero algo “necesario” dados los altos niveles de “profilaxis y decencia” que impone este Gobierno.

Además, el titular de Interior señaló que la renuncia de la directora general se ha producido por la imputación de su marido en un caso de corrupción y tildó de “falsedad” que la dimisión tenga algo que ver con el ‘caso Cuarteles’.

EL PP LO TRATÓ "DE PARAR”

Defendió que este caso de presuntas contrataciones irregulares “se trató de parar” con el Gobierno del PP y han sido Gámez y el actual equipo de Interior los que han impulsado la investigación.

Señaló que, con el actual Ejecutivo, los agentes del Servicio de Asuntos Internos de la Benemérita tienen “todos los medios para dar la respuesta adecuada” a las irregularidades que hayan podido producirse en el ‘caso Cuarteles’.

Destacó que los responsables del Instituto Armado son los “primeros interesados” en dar respuesta adecuada a este caso, que ha adquirido relevancia pública en las últimas semanas al apuntarse su eventual conexión con el ‘caso Mediador’.

Al mismo tiempo, Marlaska dijo que ni tiene “ninguna duda” de la integridad de Gámez, en referencia a que pueda tener alguna relación con el caso de corrupción por el que se investiga a su marido.

El ministro defendió que Gámez ha sido “la mejor dirigente” del Instituto Armado porque ha impuesto un “estilo de dirección y mando” que ha convertido a este cuerpo de seguridad en una “institución moderna y avanzada”. Resaltó que ha sabido aprovechar el aumento de efectivos en la institución e impulsar una mayor incorporación de la mujer en las plantillas.