Día Cerebro

Más de 23 millones de personas padecen alguna enfermedad neurológica en España

MADRID
SERVIMEDIA

Más de 23 millones de personas padecen alguna enfermedad neurológica en España, aunque son prevenibles en una mayoría de casos como en el 90% de los ictus y el 40% en el alzhéimer, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN).

Con motivo de la celebración el 22 de julio del Día Mundial del Cerebro que, este año, llevará por lema ‘Salud cerebral para todas las edades’, el presidente de la SEN, el doctor Jesús Porta-Etessam, señaló que “la salud cerebral de cada persona empieza incluso antes del nacimiento. Cada etapa de la vida es una oportunidad para cuidar y fortalecer nuestro cerebro”.

“Es por eso que este año se ha querido destacar la importancia de fomentar la salud cerebral desde la preconcepción hasta la edad avanzada. Y, para ello, es imprescindible implantar políticas de prevención y educación en salud cerebral para toda la población, y especialmente en contextos con menos recursos, donde la brecha en atención neurológica aún es alarmante”, añadió.

Con esta campaña, la SEN se une al llamamiento global para animar a personas y comunidades a adoptar hábitos y políticas que favorezcan la salud cerebral para todos, en todas las edades. Para ello, los neurólogos recomendaron hábitos cerebrosaludables en las diferentes etapas de la vida.

En la preconcepción son fundamentales los hábitos saludables de los futuros padres, como una buena nutrición y controles médicos adecuados, pueden influir directamente en el desarrollo cerebral del bebé.

DEL EMBARAZO A LA EDAD AVANZADA

Durante el embarazo, el bienestar físico y emocional de la madre es vital para el crecimiento cerebral saludable del bebé. El cuidado prenatal, una nutrición adecuada y el manejo del estrés ayudan a proteger tanto a la madre como al bebé.

En la infancia, los primeros años son clave para el aprendizaje, el crecimiento emocional y el desarrollo social. Fomentar entornos seguros, la correcta vacunación y una crianza positiva forman una base sólida para la salud cerebral a lo largo de la vida, recordaron los neurólogos.

En la edad adulta, un estilo de vida equilibrado —alimentación saludable, ejercicio y control del estrés— mantiene el cerebro sano y reduce el riesgo de muchas enfermedades neurológicas.

Durante la edad avanzada, hacerse chequeos regulares para la detección temprana de las enfermedades neurológicas y mantenerse social y mentalmente activo ayudan a preservar la independencia y la calidad de vida en la vejez.

CARGA PARA LA SALUD PÚBLICA

De hecho, aseguraron desde la SEN, las enfermedades neurológicas constituyen actualmente una de las principales causas de discapacidad y mortalidad a nivel mundial. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades neurológicas afectan a más de 3.000 millones de personas en todo el mundo.

Además, son las responsables de una de cada seis muertes y son la principal causa de años vividos con discapacidad a nivel mundial. Unas cifras que van en aumento debido al envejecimiento de la población: en los últimos 35 años el volumen total de discapacidad y muertes prematuras causadas por las enfermedades neurológicas aumentó más de un 18%.

En España, más de 23 millones de personas padecen algún tipo de enfermedad neurológica. Patologías como el ictus, la epilepsia, el alzhéimer, el párkinson, la esclerosis múltiple, la esclerosis lateral amiotrófica o las cefaleas suponen no solo un enorme coste personal y familiar, sino también un importante reto para el sistema sanitario y la sociedad en general.

ENFERMEDAD CRÓNICA

Son además las responsables del 44% de la discapacidad por enfermedad crónica y del 14% del total de fallecimientos, sobre todo debido al ictus y al alzhéimer y otras demencias.

A este respecto, destacó el doctor Porta-Etessam, “tanto la OMS como la SEN consideramos que el pilar clave para reducir el impacto de las enfermedades neurológicas es la prevención porque fomentándola conseguiríamos reducir de forma considerable la carga de la gran mayoría de las enfermedades neurológicas. Por ejemplo, hoy sabemos que hasta el 90% de los casos de ictus y el 40% de los casos de alzhéimer podrían evitarse cuidando adecuadamente nuestro cerebro”.

Por lo tanto, añadió, “debemos apostar tanto por la prevención primaria, adoptando estilos de vida saludables, evitando factores de riesgo como el tabaquismo o la inactividad física, y promoviendo la educación sanitaria desde edades tempranas; como por la prevención secundaria, fomentando la detección temprana y el tratamiento oportuno de las enfermedades neurológicas mediante revisiones y el acceso adecuado a los servicios sanitarios”.

(SERVIMEDIA)
21 Jul 2025
ABG/gja