Salud

Más de 25.000 pacientes con cefalea en racimos no recibe el tratamiento adecuado

- Según la Sociedad Española de Neurología

MADRID
SERVIMEDIA

La Sociedad Española de Neurología (SEN, denunció este martes que la mitad de los pacientes con cefalea en ramos, más de 25.000, no recibe el tratamiento adecuado.

Este tipo de dolor de cabeza, uno de los más invalidantes que existen dada la elevada intensidad del dolor, supone que un 78% de los enfermos tienen restricciones importantes en su vida diaria.

La SEN ofreció hoy estos datos porque es el Día Internacional de la Cefalea en Racimos, con el objetivo de sensibilizar sobre esta patología.

“La cefalea en racimos, si bien no es el tipo de dolor de cabeza más común, es el más habitual dentro del grupo de las cefaleas trigémino-autonómicas. Se caracteriza por la aparición de dolor en solo un lado de la cabeza y generalmente va acompañado de otros síntomas oculares o nasales como lagrimeo, enrojecimiento, congestión y/o secreción nasal”, explicó el doctor Pablo Irimia, coordinador del Grupo de Estudio de Cefaleas de la SEN. Suele tener una duración relativamente breve, pero el dolor se experimenta de forma tan intensa, que son muchos los pacientes los que lo describen como atroz o insoportable. Además, los pacientes muestran una gran inquietud motora porque toleran mal el estar en posición de descanso”.

“La cefalea en racimos es posiblemente unos de los tipos de dolor de cabeza más infradiagnosticados de España. En primer lugar porque si no se llega a cronificar, los periodos de remisión pueden ser tan amplios que son pocos los pacientes que, sobre todo en los primeros años de su enfermedad, no llegan a consultar con un especialista”, agregó el doctor Irimia. “Pero además es un tipo de dolor de cabeza en el que, a pesar de tener unas características tan específicas, como no es una enfermedad muy habitual, más del 57% de los pacientes reciben diagnósticos previos erróneos”, destacó.

Actualmente, en España, se diagnostican unos 1.000 nuevos casos de esta enfermedad. Pero aun así, existe un retraso diagnostico que, en muchos pacientes, puede ser superior a los 3 años. La principal consecuencia de no tener un diagnóstico es que, al no poder acceder al control y al tratamiento adecuados para esta enfermedad, las crisis de dolor de cabeza cada vez serán más habituales y se tenderá a la cronificación. Y cuando los pacientes tienen ya una cefalea en racimos crónica, su enfermedad no solo será mucho más discapacitante, sino que además experimentarán una menor respuesta a los fármacos. Porque calculamos, además, que un 10% de las formas crónicas son refractarias a los fármacos”, remarcó el doctor Irimia.

La SEN estima que más de un 50% de los pacientes no está recibiendo el tratamiento preventivo adecuado y que más de un 30% de los pacientes no tienen acceso a los tratamientos sintomáticos adecuados, sobre todo a la terapia con oxígeno, que es una de las principales terapias de elección.

(SERVIMEDIA)
21 Mar 2023
MAN/gja