Según informó el Ministerio del Interior, la operación de la Policía Nacional se desarrolló de forma conjunta con la División Financiera de la policía griega. Además contó con el apoyo de Europol, Euipo (Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea), Eurojust (Agencia judicial europea), Frontex (Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas) y la OLAF (Oficina europea de lucha contra el fraude).

El objetivo principal de la operación, denominada ‘Fake Star’, era la detección de productos falsificados en toda Europa que infringían los derechos de propiedad industrial de marcas de reconocido prestigio.

PARTICIPACIÓN DE 17 PAÍSES

Durante la operación, en la que participaron fuerzas de 17 países, se realizaron 378 detenciones en toda Europa. Durante los 3.921 registros ejecutados, se incautaron casi dos millones de prendas de vestir, calzado y accesorios falsificados de 258 marcas por valor de 85,8 millones de euros.

La investigación, enfocada fundamentalmente a los canales de distribución y venta, se centró en la búsqueda de estos productos fundamentalmente en áreas y polígonos industriales, mercadillos, zonas turísticas, tiendas y almacenes, contenedores de mercancías y compañías de logística. También se detectó que parte del negocio ilícito se llevaba a cabo a través de tiendas ‘online’, que anunciaban los productos a través de perfiles de redes sociales, así como tiendas en internet y compañías de logística.

Los productos intervenidos procedían en su mayoría de China, Hong Kong, Turquía o Vietnam, desde donde eran transportados por tierra o por mar hasta sus destinos finales en la Unión Europea. De entre los cerca de dos millones de productos falsificados intervenidos, se observó como la mayoría eran productos deportivos y de lujo.

La operación se desarrolló bajo el liderazgo de la Policía Nacional en Bélgica, Bulgaria, Chipre, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Malta, Polonia, Portugal, Rumanía, Eslovaquia, España, Serbia, Ucrania y Reino Unido.