Los ingresos totales se mantuvieron casi planos, con un alza del 1%, y se situaron en 740,7 millones. La facturación por servicio tuvo el mismo comportamiento y fue de 677 millones, frente a los 670,5 millones de enero-marzo de 2022. Las ventas por servicios ‘telco’ crecieron un 4%, hasta alcanzar los 610 millones, y las de otros servicios repuntaron un 2% (de 62,5 a 63,7 millones).

En un comunicado, el operador ‘amarillo’ explica que el menor crecimiento de los ingresos globales en comparación con los ingresos ‘core’ de telecomunicaciones se debe, principalmente, a la reducción de los ingresos de los servicios de energía.

El Ebitda se quedó sin variación y anotó 270 millones, en tanto que el Ebit cayó un 10%, hasta los 40,2 millones. La deuda aumentó hasta los 6.442 millones, frente a los 6.282 millones con que terminó 2022.

En cuanto a los resultados comerciales, la ‘teleco’ resalta que “continúa manteniendo su buen momento comercial a pesar de las difíciles condiciones del mercado español de las telecomunicaciones.

MásMóvil cerró el primer trimestre con 15,4 millones de clientes, 700.000 más que en el mismo periodo del año anterior. Ganó 200.00 suscriptores de banda ancha y llegó a los 3,3 millones, en móvil pospago sumó 500.000 y alcanzó los 9,4 millones y en prepago se quedó en los mismos 2,7 millones.

El consejero delegado del grupo, Meinrad Spenger, comentó que “el equipo de MásMóvil demuestra trimestre tras trimestre que tener los clientes más satisfechos tiene mucho valor. Nos permite seguir creciendo en un entorno muy competitivo a muy buen ritmo tanto en clientes de banda ancha como de móvil pospago”.