En las 67 personas de 20 a 70 años que realizaban actividades sociales regulares, el equipo del doctor Bert Uchino, del Departamento de Psicología del centro, encontró que tenían una esperanza de vida similar a las que realizaban ejercicio físico.

Los investigadores aseguraron en las conclusiones del trabajo que el apoyo de amigos y familia modera el incremento de la tensión arteria en las personas mayores, y sólo encontraron casos de tensión alta causada por la edad en personas que tenían una actividad social pobre o nula.