Figueiredo declaró, también, que los policías José Amedo Fouce y Michel Domínguez fueron los que le encargaron realizar acciones contra terroristas en el sur de Francia.

El mercenario portugués, a preguntas del presidente del tribunal, el magistrado Dagués, dijo que fue captado por un compañero de trabajo y dos personas que afirmaron ser policías que respondían a los nombres de "Ricardo" y "Eduardo". Estos han sido identificados a tavés de fotografías como José Amedo Fouce y Michel Domínguez, respectivamente, por el procesado.

Paulo Figueiredo indicó, asimismo, que se solicitaron sus servicios para formar parte de un grupo para-policial encargado de llevar a cabo acciones contra terroristas en el sur de Francia. Por cada muerto, según declaró, recibirían 100.000 francos (alrededor de 2 millones de pesetas).

El presunto miembro de los GAL añadió que la víspera del primer atentado cruzaron la frontera de Irún, con dirección aBilbao, en un coche policial y que fue en esta última localidad donde recibieron las armas con la numeración borrada.

En su declaración añadió que el primer atentado estaba dirigido contra Juan Luis Zabaleta Elósegui, presunto miembro de ETA y hermano del miembro de esta organización terrorista José Manuel Zabaleta Elósegui, alias "Baldo".

El procesado negó su participación en el segundo atentado, el perpetrado en el bar "La Consolation" el 13 de febrero de 1986, aunque señaló que estaba dirigidocontra el presunto miembro de ETA Ramón Gómez Abetxuko.

En la sala se encontraban éste último, condenado a 4 años de prisión en una cárcel francesa por colaboración con banda armada, y Frederic Haramburu, quien resultó herido en el primer atentado y que fue detenido el pasado año, al ser uno de los integrantes del "Comando Itinerante" de ETA.