En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutiva, Isabel Rodríguez, insistió en la posición de que la moción es un instrumento constitucional y, por eso, abordan este debate con la “seriedad que exigen” estas herramientas de la democracia.

No obstante, la portavoz no aclaró si Sánchez será el que defienda su gestión agarrándose a que la moción de censura -registrada ayer lunes- “todavía” no ha sido calificada por la Mesa del Congreso y hablar del papel de Sánchez en el debate es un tema de “futuribles”.

“Cada día tiene su afán”, responden desde La Moncloa ante las peticiones de confirmación de si Sánchez participará en el debate, una opción que desde el PSOE creen que sucederá en “un 99,9%” aunque se resguardan en que el asunto “todavía” no se ha cerrado con el presidente.

A preguntas sobre la moción de censura de Vox, en la que Ramón Tamames es el candidato a la Presidencia del Gobierno, la portavoz del Ejecutivo tampoco despejó el calendario sobre el debate -cuya fecha la marca la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, previa consulta con el Ejecutivo- aferrándose también a la falta de calificación de la moción por parte de la Mesa, trámite que se dará la semana que viene.

Para lo que sí tuvo una posición clara la portavoz fue para reconocer que no deja de “ser sorprendente” la posición sobre este asunto del principal partido de la oposición, y se preguntó por la “valentía y autonomía” del PP que defendió Pablo Casado cuando lideraba el partido en la pasada moción de censura de Vox frente al “seguidismo” que, adujo, practica ahora el PP de Alberto Núñez Feijóo.

La ministra trasladó que “algo acordaron” Feijóo y el líder de Vox, Santiago Abascal, en la reunión que mantuvieron porque ahora el PP está “estrechando su mano con la extrema derecha” con su intención de abstenerse en la moción.