De los Mozos hizo este anuncio en su discurso en la Junta Ordinaria de Accionistas de la compañía, donde fue ratificado como consejero de la sociedad y se aprobaron los nombramientos de María Ángeles Santamaría, Elena García Armada y Pablo Jiménez de Parga.

Además, el nuevo consejero delegado explicó otras de las acciones concretas que va a llevar a cabo tras su ratificación, entre las que destacan el nombramiento de un comité de dirección estructurado en torno a los negocios, donde Minsait preservará su autonomía, o el lanzamiento del proyecto Indra 4.0, para posicionar a la empresa como compañía digital de referencia.

Por otro lado, destacó que Indra dispone de “capacidades estratégicas para el tejido industrial español”, así como de “activos y una situación financiera únicos” para actuar en mercados de crecimiento a largo plazo como son la defensa, el tráfico aéreo y la movilidad.

Por ello, se mostró convencido de que Indra será “la multinacional española de referencia en defensa y tecnología” y se fijó el reto de lograr un “crecimiento rentable sin olvidar la disciplina financiera”. “Necesitamos crecer para competir en Europa” y alcanzar el nivel de empresas como Thales o Leonardo, añadió

Por último, resumió sus objetivos al frente de Indra en cuatro prioridades, “las 4 T”. En concreto, habló de tracción, transformación, talento y tecnología.

Por su parte, el presidente de Indra, Marc Murtra, destacó que “2022 ha sido un año muy relevante” para la compañía, que logró “máximos históricos” en cartera de proyectos, ingresos y beneficio bruto de explotación (Ebitda).

Además, anunció que Indra afronta “una nueva era, con un nuevo liderazgo, nuevos accionistas y nuevos consejeros que reflejan de forma más ajustada la visión de futuro de la compañía” y le permiten estar “más enfocada en negocios estratégicos, de futuro y en las nuevas oportunidades tecnológicas que el momento actual nos ofrece”.

Los accionistas respaldaron también los resultados de la compañía en 2022, cuando obtuvo un beneficio de 172 millones de euros, lo que supuso un 19,9% más que el año anterior, y el pago de un dividendo de 0,25 euros por acción, un 67% más.

Además, aprobaron la ampliación a dieciséis en el número de consejeros para responder a la nueva realidad creada por la nueva composición accionarial de la compañía y seguir cumpliendo las mejores prácticas de gobierno corporativo.

En concreto, con los nombramientos de María Ángeles Santamaría y Elena García Armada Indra cumple la recomendación 17 del Código de Buen Gobierno, con al menos la mitad de independientes de un total de dieciséis consejeros. Al mismo tiempo, refuerza el compromiso de Indra con la diversidad de género, hasta alcanzar el 37,5% de presencia femenina en el Consejo.