Dichas normas ampliarán el contenido del acuerdo entre Nissan y Renault, que actualmente aplican ambas compañías a todos sus proveedores globales de materiales y piezas.

Las nuevas normas de Nissan tienen como principales objetivos que se reduzca el uso de sustancias que causen impacto medioambiental en los materiales y piezas suministrados a la empresa, y hacer públicas las emisiones de CO2 generadas en su fabricación.

Asimismo, Nissan supervisará el comportamiento de sus proveedores de materiales y piezas para garantizar que cumplen las nuevas directrices.

Las nuevas normas de la empresa de automoción reflejan los objetivos establecidos en su programa ecológico a medio plazo, que pretende desarrollar nuevas tecnologías, productos y servicios capaces de lograr reducciones reales de las emisiones de CO2 de los vehículos a motor, y que se reciclen los recursos utilizados en toda la cadena de fabricación y suministro.

Desde julio de 2007, Nissan ha incrementado su esfuerzo para reducir y erradicar el uso de las sustancias más contaminantes, entre ellas compuestos con metales pesados como mercurio, plomo, cadmio y cromo hexavalente, así como compuestos con cromo hexavalente.