La UBS considera que los resultados del nuevo BEX se verán muy beneficiados tras la fusión, debido a la drástica caída de las necesidaes de provisionamiento.

El estudio de los bancos suizos, que analiza los efectos de la fusión de estas dos entidades, sitúa en 26.000 millones de pesetas el beneficio neto que obtendrá el antiguo BEX en 1991, cifra que ascenderá a 30.400 millones en 1992, sin tener en cuenta la aportación del BCI.

Según la UBS, como consecuencia de la fusión se emitirán 34 millones de nuevas acciones. Los autores del estudio aseguran que la "ratio" de beneficios por acción para los dos bancos combinados mejorará e un 372 en 1990 a un 446 en 1991 y un 515 en 1992.

En opinión de los responsables de la UBS, bajo la presidencia de Francisco Luzón "el BEX ha mejorado de forma impresionante en los últimos dos años y su rentabilidad básica -eliminando créditos de mediación- está ya a los niveles de los mejores en su sector".

PARTICIPACION DEL ESTADO

En cuanto a la participación estatal en el BEX, que ha pasado de un 62,7 a un 76 por ciento tras la fusión con el BCI, la UBS cree que "el Estado, dentro de su poítica de incrementar la orientación al mercado de la Corporación Bancaria Española (CBE), podría disminuir su participación a cerca de un 51 por ciento".

Ello ocasionaría una emisión de acciones, que, según la UBS, se produciría hacia finales de 1991, y cuya compra recomiendan los bancos suizos.

Para la UBS, "la pertenencia del BEX a un grupo bancario público poderoso, la CBE, el reforzamiento de su ya fuerte adecuación de capital tras la fusión del BCI y su potencial para alcanzar un crecimientosostenido del beneficio por arriba del promedio del sector" son aspectos suficientes para recomendar la compra de estas acciones.

Respecto a la CBE, la UBS cree que, aunque se considera como una fusión, el nuevo banco público debe verse como un grupo de empresas diversificado bajo una dirección única.