El pasado viernes, las bases de Junts decidieron por un 55,73% de votos que este partido abandonase el Gobierno de coalición con ERC, por lo que sus siete consejeros -Josep María Argimon, Jaume Giró, Victòria Alsina, Lourdes Ciuró, Gemma Geis, y Violant Cervera- hicieron llegar su renuncia al cargo esa misma tarde.

Tras esta decisión que Aragonès respetó, pero aseguró no compartir, decidió continuar en el Ejecutivo catalán. El sábado se reunió con la consejera de la Presidencia, Laura Vilagrà, y con su equipo para trabajar en la continuidad del Gobierno. Ese mismo día también mantuvo encuentros con los agentes sociales y económicos.

Después de dos días de reuniones, Aragonès hizo oficial el nombre de los nuevos consejeros: Natàlia Mas (Economía y Hacienda); Meritxell Serret (Acción Exterior); Joaquim Nadal (Investigación y Universidades); Juli Fernández (Territorio); Manel Balcells (Salud); Carles Campuzano (Derechos sociales), y Gemma Ubasart (Justicia, Derechos y Memoria).

En el nuevo Ejecutivo de Aragonès no existe la figura de vicepresidente, un puesto que ocupaba anteriormente Jordi Puigneró, cesado hace casi dos semanas. Además, el presidente catalán aprovechó esta situación para cambiar el nombre de diferentes consejerías, añadiendo o quitando algunas competencias.

Con esta decisión, Aragonès incorpora a su Gobierno a exmiembros del PSC (Nadal, quien abandonó este partido en 2015), de Podemos (Ubasart, que fue líder de este partido en Cataluña) y de la antigua Convergencia (Campuzano). Además, Serret formará parte del Govern más de un año después de volver a Cataluña tras permanecer desde 2017 en Bélgica.