Así lo demandó en un comunicado en el que también reclamó a las compañías aéreas que permitan a los usuarios cancelar sus viajes a la región afectada “sin perder el importe de sus billetes” después de que el Ministerio de Asuntos Exteriores haya actualizado en su página web una recomendación con consejos prácticos para las personas que tengan un viaje o vuelo programado a la región afectada por el terremoto.

“El Ministerio se ha limitado a recomendar a los viajeros españoles que tengan previsto viajar a Marruecos en los próximos días que se mantengan en todo momento informados sobre la situación en el lugar de destino de su viaje, siguiendo recomendaciones de las autoridades locales en cuanto a sus desplazamientos y medidas de protección”, abundó.

A este respecto, añadió que, en caso de tener programado un viaje a la zona de Marrakech, la recomendación es consultar con la compañía aérea si el vuelo se ha visto afectado y “valorar la posibilidad de aplazar el viaje”, consejo que ve “insuficiente”.

“Valorar la posibilidad de aplazar el viaje no es suficiente sin afirmar de forma clara que la situación actual constituye una circunstancia extraordinaria de fuerza mayor que debe permitir a los usuarios cancelar los viajes contratados sin hacer frente a las penalizaciones que figuran en los contratos”, advirtió, convencida de que la situación en destino “compromete la seguridad de los viajeros”.

MIEDO INSUPERABLE

Para la OCU, el “miedo insuperable de muchos usuarios” y el hecho de que, tanto los propios hoteles u otros servicios como los organizadores de excursiones están “cancelando de oficio”, es "una razón más que suficiente para cancelar por razón de fuerza mayor las reservas efectuadas”.

“No se trata de una cancelación voluntaria, sino de una decisión motivada por la incertidumbre sobre las consecuencias personales y económicas que puede tener ahora mismo viajar a esa región de Marruecos”, sentenció.

En este sentido, urgió al departamento de José Manuel Albares a que “revise su recomendación”, establezca que la misma “tenga carácter vinculante” y “considere la situación actual como causa de fuerza mayor”. Además, le emplazó a que, con los “mecanismos legales” a su alcance, “inste” a las aerolíneas a que permitan a los usuarios cancelar los viajes contratados “sin hacer frente a las penalizaciones de los contratos”.

De lo contrario, se estaría produciendo, a su entender, “un perjuicio grave” a los consumidores que “se ven obligados a asumir las consecuencias económicas de una situación de la que no son responsables”.

En este contexto, aconsejó a quienes “se ven obligados a cancelar un viaje de ocio a esta zona” que indiquen “claramente” que dicha cancelación se debe a “circunstancias de fuerza mayor” y conserven “toda la documentación donde se recoja la negativa a proceder a la cancelación y los gastos ocasionados" para, "en el futuro y a la vista de la evolución de los acontecimientos", poder reclamar judicialmente "si es necesario" la devolución de estas cantidades.