Así lo desvela un análisis realizado por la asociación sobre 20 merluzas congeladas y que, entre otros productos, destaca los filetes congelados de El Cabo sin piel de Carrefour, Flete (Aldi) y El Corte Inglés, que implican un “significativo ahorro” frente a los 10 euros/kilo de la merluza fresca y los 15 de la merluza de pincho, a las que hay sumar luego un 20% de desperdicio, según precisó en un comunicado.

Por lo que respecta a Carrefour sus filetes de merluza del Cabo, a la venta por un precio medio de 6,85 euros, son los mejor valorados en la degustación por el panel de expertos. No obstante, según la investigación, el producto “podría mejorar” en la información de su etiqueta, indicando el número de piezas, el peso por ración o la información nutricional por ración.

Además, Flete (Aldi), filetes de merluza del Cabo, está a la venta por un precio medio de 6,58 euros, el más bajo del estudio, y tiene a favor su buena calidad. En contra, su sabor es “mejorable” y “ligero” en su degustación.

Finalmente, en El Corte Inglés el filete de merluza del Cabo se vende a un precio medio por kilo de 6,84 euros y tiene a favor su buena calidad, destacando la "ausencia de defectos”. Sin embargo, su textura “es mejorable” y “algo blanda” y en el etiquetado falta el número de piezas y la información nutricional por ración.

La organización afirmó que la calidad general de los productos analizados es “buena” y no ha observado contaminación “significativa” por metales pesados, solo mercurio en dos muestras, pero en cantidades “muy por debajo del límite”.

Tampoco ha encontrado parásitos como el anisakis, aunque al estar congelados no habría riesgos asociados, ni ha detectado aditivos y, una vez eliminado el glaseado, el peso “cumple con los márgenes que establece la normativa”, según el estudio.

SIN DEFECTOS GRAVES

Junto a ello, el análisis confirma también que las merluzas congeladas seleccionadas son productos “frescos y limpios, sin piel ni espinas” y que no tienen “defectos graves” salvo algún resto de piel, alguna pieza desflecada y, “en menor medida, coágulos de sangre”.

“De hecho, su valor nutricional es exactamente el mismo que el de una merluza fresca de pescadería”, insistió OCU, que recomienda introducir el pescado en la dieta, cuanto “más variado, mejor” y siempre “procurando evitar las especies más grandes”, como el pez espada, el atún o el cazón, por el “riesgo” de que contengan metales pesados, por lo que su consumo está desaconsejado en niños y mujeres embarazadas.