Así lo indicó en declaraciones a los medios de comunicación tras la constitución del nuevo Consistorio de la capital, en el que el José Luis Martínez-Almeida recibió el bastón de mando tras lograr una mayoría absoluta el pasado 28 de mayo.

Ortega Smith señaló que su compañero “no tuvo un buen día” y enfatizó que sus palabras han sido “inmediatamente revocadas por él mismo y aclaradas”. “Queremos que no haya ninguna duda, toda nuestra lucha contra quienes consideren que pueden ejercer la fuerza contra otro, y la violencia contra otro ser humano, si es su pareja, su mujer, su marido o su pareja homosexual”, añadió.

El portavoz del partido en el Consistorio madrileño apuntó que Vox defiende que “hay que proteger a todas las víctimas”, sean estas “mujeres, hombres, niños, ancianos, heterosexuales u homosexuales”, es decir, que hay que “combatir toda la violencia en el seno intrafamiliar”.

Asimismo, dijo que “no hay que tolerar una entrada de inmigración masiva y legal” que traen desde países “donde se defiende desde la posición oficial”, refiriéndose a los estados islamistas, la “violencia contra la mujer de manera institucionalizada”.

"TERRIBLE TENTACIÓN"

En cuanto a la elección de Almeida como alcalde de Madrid, manifestó su deseo para que el popular “no se deje llevar por esa terrible tentación de la política” de “pensar que si tienes mayoría absoluta estás legitimado para hacerlo todo o que tienes siempre razón”.

Ortega Smith ofreció sus votos, aunque “no los necesiten”, a todas aquellas políticas “que sirvan para el bienestar, para la seguridad y para el desarrollo de Madrid en libertad” y reivindicó que habrá “una oposición leal y constructiva con todos los madrileños”.

Asimismo, aseguró que su formación no renunciará a sus principios y propuestas que vienen defendiendo desde hace cuatro años y seguirán denunciando Madrid Central por convertir la ciudad en un “coto privilegiado de unos pocos, de aquellos que puedan comprarse un vehículo eléctrico”, y continuarán una “bajada real de todos los impuestos” y que la seguridad en las calles “tiene que llegar hasta el último barrio”.

“Vamos a seguir defendiendo un Madrid que de verdad genere un ambiente razonable, saludable y dispuesto a que a nadie le pueda perjudicar en su trabajo ni en su movilidad”, explicó el portavoz.