Aniversario pandemia

Dos mujeres relatan cómo es vivir con covid persistente tres años después de la pandemia

- Hoy se celebra el Día Mundial de la Covid persistente, coincidiendo con el aniversario del encierro por la pandemia

- Tres años después sigue habiendo nuevos casos de coronavirus con secuelas incapacitantes

Madrid
SERVIMEDIA

Enfermos de covid persistente reclaman que se facilite el reconocimiento de situaciones de incapacidad y discapacidad que provoca esta enfermedad, en aquellos casos que sea necesario, al cumplirse tres años de la entrada en vigor del estado de alarma decretado en España por la pandemia en marzo de 2020.

“Me llamo Isabel, tengo ahora mismo 46 años. Soy madre de dos hijas adolescentes y mi trabajo era ser enfermera. Yo no he podido volver a trabajar y diría que mi calidad de vida ha empeorado un 70%”. Así comienza su relato a Servimedia Isabel Quintana, una de las miles de pacientes de covid persistente que hay en España.

Explica que no puede trabajar cuidando a nadie, ya que muchas veces necesita que la cuiden a ella. Además, precisa recibir frecuentes sesiones de fisioterapia para mejorar su movilidad. "Tiene dolores incapacitantes y niebla mental, con signos como pérdida de memoria, dificultad para encontrar palabras, problemas de atención o abrumarse ante tareas simples, entre otros síntomas".

“Es como una fibromialgia de la que no conseguimos sacar una ‘foto’ para que la vean los especialistas”, explica. Eso también influye de cara a lograr la incapacidad permanente por parte del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y el grado de discapacidad, que en muchos casos ya se está solicitando, no sin ciertas trabas.

La definición de covid persistente es la condición que ocurre en individuos con antecedentes de infección probable o confirmada por SARS-CoV-2, generalmente tres meses después del inicio, con síntomas que duran al menos dos meses y no pueden explicarse con un diagnóstico alternativo.

Además, en España, las asociaciones de pacientes de covid persistente denunciaron el pasado 14 de marzo que aún no se conoce el número de enfermos y solicitaron que se cree un registro nacional de pacientes, además de pedir que se unifique criterios para su diagnóstico y tratamiento.

Desde el principio de la pandemia en España se han registrado oficialmente 13,7 millones de positivos por coronavirus, con más de 119.000 fallecidos, según datos de la organización Mundial de la Salud (OMS). Se calcula que un 10-15% que ha pasado covid-19 tienen síntomas persistentes y, en la mitad de los casos, pueden ser incapacitantes, pero no existen cifras oficiales en España.

Según la directora de la Respuesta a la Covid de la OMS, Maria Van Kerkhove, al menos un 10% de las infecciones por coronavirus tiene muchas posibilidades de convertirse en un covid de larga duración o persistente, lo que supone más de 17 millones de afectados por covid persistente en Europa, según un reciente informe de la Organización.

SÍNTOMAS INCAPACITANTES

Los principales síntomas de esta enfermedad, entre los 207 descritos, son fuertes dolores músculoesqueléticos, cansancio extremo, niebla mental, dificultad para hablar, además de sensación de ahogo y opresión en el pecho, depresión y ansiedad. También puede haber afectación cardiaca, como palpitaciones, y de otros órganos.

Eso le pasó a Carmen González, contagiada por coronavirus en marzo de 2020 y aún hoy está en revisión por sus problemas de corazón derivados de covid de larga duración: “En el corazón que tenía un derrame de pericárdico. En cuanto daba dos pasos, me entraban taquicardias y no podía subir escaleras, ni cuestas, no podía hacer nada, y de ese derrame todavía estoy en revisión”.

“En el hígado me salió un quistecillo, parece que benigno, y también he tenido alteraciones después de problemas de la piel y ginecológicos”, explica. El resultado final es que le diagnosticaron covid persistente y también ella tuvo que dejar su trabajo de profesora de baile desde el comienzo de los síntomas.

No ha podido volver dar clases de baile a niños. "Yo daba clases bailando en todo momento, incluso cuando explicaba, y ahora no puedo hacerlo, aunque es cierto que me encuentro un poco mejor que cuando tuve las taquicardias más graves", recalca.

Ambas, Isabel y Carmen, aseguran "haber llorado" por la persona que eran antes de la enfermedad y afirman que hay un antes y un después en sus vidas antes de haberse infectado por coronavirus.

EL "DESGASTE" DE LA INCAPACIDAD

Si pudieran, hay algo que estos pacientes cambiarían de todo el proceso que han pasado con la covid-19. “Me hubiera gustado que me reconocieran la incapacidad permanente de primeras sin tener toda esta pelea, porque es un desgaste increíble”, asegura Isabel Quintana, la enfermera gallega, que se declara amante de su profesión, aunque ahora no pueda ejercerla.

Además, muchas de las pruebas que les hacen a los pacientes de covid de larga duración no encuentran nada. “Muchas veces están dentro de los valores normales, no hay ninguna alteración física visible. Lo que para cualquier persona sería maravilloso, para nosotros es un calvario porque no tenemos la ‘foto’ de nuestra enfermedad”.

El retrato robot de la persona que sufre covid persistente es el de una mujer de entre 30-50 años que padece más de tres síntomas de la covid-19 de manera permanente. Otro problema es que, tres años después, los nuevos pacientes de este tipo de covid se encuentran con los mismos problemas que los pacientes más veteranos.

“La única diferencia que hay es que los nuevos pacientes nos tienen a nosotros. No es justo que ellos se vean con los mismos problemas que nosotros sufrimos hace dos o tres años”.

Lo peor es que, según Quintana, hoy existen los mismos problemas: "Las mismas incomprensiones en las administraciones, las mismas dudas por parte de muchos médicos que todavía siguen diciendo que lo nuestro es un problema psicológico, los mismos problemas con el INSS, que sigue poniendo muchas de pegas para las incapacidades, y la misma sensación de estar perdidos”.

Reitera la sensación de “incomprensión por parte de muchísimos profesionales sanitarios, algunos de los cuales aún nos preguntan si nuestra prueba de covid sigue saliendo positiva, con lo que demuestran que no conocen esta enfermedad”.

“Todavía se escucha muy poco a los pacientes en las instituciones, pero el conocimiento más importante que hay sobre el covid persistente, lo hemos generado nosotros. Y muchos somos pacientes expertos, al ser sanitarios porque sabemos de lo que se está hablando”, concluye esta paciente luchadora, que aprende todos los días a convivir con el covid de larga duración.

(SERVIMEDIA)
15 Mar 2023
CAG/pai/clc