Para Carmona Peláez, vecino de Escacena del Campo (Huelva), se trata de un "caso claro" de "negligencia médica" por lo que ha denunciado judicialmente a los tres facultativos y espera que sean llamados a declarar próximamente junto alos testigos, después de que sea admitida a trámite su demanda en el Juzgado de Instrucción, número 4, de la capital onubense.

"No hicieron nada por salvar a nuestrohijo y, aunque nada ni nadie lo va a devolver a nuestra casa, esperamos que la justicia diga la verdad y se sepa realmente por lo que no se vacunó a la criatura a pesar de que se sabía que mi mujer era portadora del virus de la hepatitis", dijo.

También denunció que ni su esposa ni su hijo fueron sometidos durnate el parto o antes de él a una adecuada analítica que hubiese permitido o aconsejado la adopción de las medidas preventivas.

Carmona Peláez está casado con Isabel Calero Fernández, de 23 ños. Ambos tuvieron un bebé en noviembre y falleció en febrero de este año a consecuencia de la hepatitis B.

Los progenitores del pequeño fallecido confían en que apróximadamente se esclarecerá lo sucedido por entender "que podrían darse nuevos casos y no queremos que nadie pase por esta tragedia", señaló.