Autismo

El padre de un niño autista reconstruye en solitario su casa tras el incendio de Tres Cantos

- Elian, de 13 años, tiene autismo severo provocado por una enfermedad ultarrara

Madrid
SERVIMEDIA

Carlos Mayorga tiene un hijo con autismo severo pero ha perdido la casa que él mismo había construido y adaptado a las necesidades especiales del menor. El incendio de este verano en Tres Cantos (Madrid) redujo a cenizas su hogar. Ahora se ha propuesto levantar de la nada una nueva casa en tiempo récord, esta misma semana.

El progenitor explica cómo levantó la casa, ahora calcinada, sin apenas ayuda. “Adapté unos contenderos del puerto de Valencia para convertirlos en una casa adaptada, accesible y sensorial. Sólo llevábamos seis días viviendo allí. No estaba ni asegurada y ahora no tenemos nada”.

Carlos es arquitecto informático, pero de construir edificios no sabe mucho. Los gastos que genera el cuidado de su hijo diagnosticado de autismo provocado por el síndrome MEF2C (una enfermedad ultrarrara) fue lo que le condujo a apostar por una vivienda alternativa y más económica. “Era una casa que alimentaba de luz solar, el agua procedía del pozo. En fin, no teníamos casi gastos. Eso sí estuve casi dos años trabajando prácticamente solo para levantar la casa en un terreno cedido por mis padres”, rememora.

El pasado mes de agosto cuando se originó el incendio afortunadamente Elian de 13 años se encontraba en casa de su madre. Carlos recuerda aquellos minutos como su hubiera llegado un tsunami a su casa: “En cinco segundos ya tenía todo el cañizo que rodea la vivienda con unas llamas de cinco metros de altura. ¡Se me quemaron hasta las pestañas! Y me dije: ‘Mi casa o mi vida’. No se lo pensó dos veces. Cogió a su gato, ‘lo tiró’ dentro del coche y salió a toda velocidad del lugar provisto únicamente de un bañador y unas chancletas.

DOS AÑOS DE TRABAJO CALCINADO

Ahora Carlos se ha quedado sin hogar, pertenencias, herramientas de trabajo y sin recuerdos personales. Pero lo que más le angustia es que mientras no disponga de un hogar estable que ofrecer a su hijo debe permanecer separado de Elian. Por eso, unos amigos le animaron a lanzar una campaña de microfinanciación en redes sociales exponiendo su situación a través de un video.

Gracias al ‘crowdfunding’ se ha reunido suficiente dinero porque ha habido aportaciones de amigos, pero también de entidades sociales como Autismo España y Fundación ONCE. Carlos calcula que entre estas aportaciones y las donaciones de particulares que llegan a través de la campaña de microfinanciación puesta en marcha en redes sociales pueden haber recaudado “en torno a unos 58.000 euros”. “Con esa cantidad tengo suficiente para proporcionar un lugar estable a mi hijo y que se pueda adaptar" a la vuelta al colegio, explica Carlos de modo resolutivo.

A lo largo de estos días, pasa todas las horas que le permite la luz natural para allanar el terreno con una retroexcavadora que él mismo ha aprendido a manejar. Es consciente de que el tiempo apremia y que, en esta ocasión, tendrá que apostar por fórmulas más rápidas como una casa prefabricada. “Elian tiene la capacidad cognitiva de un niño de dos años asi que no es consciente de que su casa y su habitación sensorial no existe”.

El reto de este padre es levantar un hogar en apenas unos días donde antes solo había cenizas. Además, se ha propuesto replicar en su interior, el mismo orden de los objetos, los mismos pictogramas que empapelaban las paredes. “Trataré de recrear la habitación que tenía antes del incendio porque los niños con autismo necesitan rutinas y esperemos que poco a poco Elian se vaya adaptando”, subraya.

(SERVIMEDIA)
08 Sep 2025
AOA/pai/mag