Peces-Barba explicó en rueda de prensa en Valencia, donde participa en el III Congreso Internacional sobre Víctimas del Terrorismo, que había hablado hoy con Zapatero sobre este asunto, después de que a primera hora comentara en una entrevista radiofónica que dejará de ser Alto Comisionado en los próximos meses.

Afirmó que a pesar de que ya había hablado anteriormente con Zapatero de su marcha, el jefe del Ejecutivo le pidió que aplazase esta renuncia, algo que rechazó el también rector de la Universidad Carlos III.

Esto supone, explicó Peces-Barba, que abandonará la oficina para las víctimas como muy tarde en noviembre, ya que su deseo es dedicarse en exclusiva a su trabajo de rector durante los últimos meses en los que ocupará este cargo.

"NADIE ME HA ECHADO"

En todo caso, dijo que "de aquí nadie me ha echado" y añadió que hasta su relevo hay nueve meses en los que seguirá trabajando para presentar al Gobierno el proyecto de reforma de Ley de Solidaridad con las Víctimas, que, dijo, debe entregar a Zapatero antes de abril.

En cuanto al debate sobre una eventual negociación con ETA, señaló que lo que puede asegurar, como cargo dependiente del Ejecutivo, es que "no va haber ningún paso" hasta que no se produzca un cese de la violencia. "Sin tregua ni cese de actividades no va a haber ninguna negociación", remarcó.

Asimismo, sostuvo que tampoco va a haber "paz por presos", algo que, dijo, parece que va a ser una de las conclusiones del Congreso de Víctimas de Valencia. A este respecto, informó de que Zapatero le había pedido que gestionase que representantes de estas jornadas fueran en persona a entregarle el documento con lo acordado.

Peces-Barba indicó que los organizadores del congreso habían mostrado su disposición a atender la petición del presidente, encuentro al que podrán acudir los representantes de las víctimas que lo deseen.