Este programa consta de varias fases: en la primera, que se inicia el 1 de enero y concluye el 31 de diciembre del 2001, las pensiones se pagarán físicamente en pesetas, pero las transacciones financieras se harán en euros.

En la segunda, que abarca hasta el 30 de junio del 2002, coexistirán la peseta y el euro para todo tipo de pagos y cobros. A partir de julio de ese año, la única oneda de curso legal será el euro.

Hasta la implantación definitiva del euro, la Seguridad Social remitirá un folleto informativo al respecto a todos los colectivos con los que se relaciona. Además, incluirá los importes equivalentes en euros en todas sus publicaciones informativas sobre cotizaciones.

Los boletines de cotización, que se remiten a 820.000 trabajadores de los regímenes especiales agrario y del hogar, vendrán expresados en pesetas y euros a partir de enero, y podrán cumplimentarse e pesetas hasta el 31 de diciembre del 2001.

El ingreso de las cotizaciones también se podrá realizar indistintamente en pesetas y euros hasta la entrada en vigor de la moneda única.