Según manifestó en rueda de prensa Jesús Silva, fiscal de este tribunal, l medida ha sido adoptada como una muestra de disconformidad ante la sentencia aplicada en este caso.

"No podemos recurrirla porque es una sentencia correcta y ajustada a derecho", dijo, "pero la fiscalía lamenta y no entiende que el tribunal no haya ampliado el tiempo de condena a 4 años y 2 meses".

Para la fiscalía madrileña, esta medida habría evitado una libertad "tan sonora e inmediata", realizada "con alardes de presunción y jactancia", a pesar de que el condenado se apoderó de cerca de 300 illones de pesetas. Se sospecha que la mitad (139.783.000 pesetas) continúan aún en su poder.

Silva explicó que el principal problema radica en que las penas son insuficientes en el caso específico de los delitos de hurto, estafa o apropiación indebida, ya que son de arresto mayor o prisión menor para todos aquellos casos en que las cantidades excedan de las 30.000 pesetas.

"Esto da lugar a una casi impunidad del delincuente y deja a la sociedad inerme ante los delitos de gran cuantía y alcance",declaró, al tiempo que expuso la conveniencia de que se dicten penas en consonancia con el perjuicio económico causado.

La fiscalía madrileña estima además que con estas penas no se aplica la ejemplaridad de la sanción. Como muestra de ello, Silva aludió al hecho de que la conducta del famoso delincuente haya llegado a ser tachada de "admirable" y que una gran cantidad trabajadores hayan declarado que habrían deseado hacer lo mismo que el "Dioni" en el caso de estar en su lugar.