Borrell criticó la actitud que mantuvo el PP en 1993, recordando que no presentó un texto alternativo al del Gobierno y acusando al entonces primer partido de la oposición de "obstruir" la tramitación de aquel plan hidrológico.

Asimismo, recordó que entonces el PP se opuo al PHN porque previamente no se había aprobado un Plan Nacional de Regadíos y destacó que en la presente legislatura el Gobierno de José María Aznar todavía no ha presentado ese plan.

"El PP se limitó a descalificar con referencias teológicas el plan", ya que rememoró las declaraciones de José María Aznar en las que aseguraba que en algunas zonas de España hay escasez de agua porque Dios así lo ha querido.

Respecto al proyecto de PHN que hoy comenzó a tramitarse en el Parlamento, el ex ministrodijo que hacer recaer todo el caudal a trasvasar entre cuencas sólo en el Ebro carece de lógica económica y política.

Por el contrario, señaló que la alternativa del PSOE no descarta los trasvases entre cuencas, ya que deja abierta esta opción, pero matizó que los considera como última opción.

Respecto a las diferencias entre el plan de 1993 y el que su partido ha presentado ahora, dijo que las circunstancias económicas y las necesidades de agua han cambiado, fundamentalmente porque en la actualiad, dijo, se parte de la base de que la superficie de regadíos en el litoral mediterráneo no aumentará, mientras que a principios de los noventa se manejaba la hipótesis contraria.

Asimismo, indicó que el coste de la desalación en la actualidad es significativamente menor que en 1993, justificando así la importancia que el texto socialista concede a las desaladoras.