Emilio Di Giovanni, procedente de la afia calabresa italiana, fue detenido junto a numerosos miembros de la banda en la operación que los jueces Baltasar Garzón y Carlos Bueren iniciaron a principios del pasado año en el Algarve portugés y que se extendió a zonas de España, Italia y Marruecos.

Además, la red luso-española parcialmente desarticulada esta pasada semana en el Algarve portugués, también podría haber estado conectada con el colombiano cártel de Medellín.

En la operación policial para el desmantelamiento de la banda de deincuentes intervinieron unos cien efectivos, apoyados por diversos medios terrestres y marítimos.

De los cinco detenidos, que fueron presentados el pasado sábado ante el Tribunal de Portimao, tres son de nacionalidad española y dos portugueses, aunque no fue facilitada su identidad.

La policía espera que los arrestos de otros miembros de esa red hispano-portuguesa de delincuentes sigan en los próximos días, al hilo de los interogatorios a que han sometido a los cinco apresados.

Además, los aentes incautaron a los delincuentes más de 3.000 kilos de hachís, procedentes de Marruecos, dos vehículos de lujo, dos barcos pesqueros y diversos aparatos de telecomunicaciones en las localidades lusas de Portimao y Segres.