Mayor Oreja visitó hoy la mencionada cárcel para comprobar "in situ" el desarrollo de una experiencia piloto de intervención integral en drogodependencias, que ha sid diseñada por la ONG Proyecto Hombre, la Delegación del Gobierno en el Plan Nacional sobre Drogas y la Dirección General de Instituciones Penitenciarias.

El ministro, tras visitar diversas dependencias carcelarias, tuvo ocasión de celebrar un encuentro privado con un grupo de reclusos que se han acogido al plan de desintoxicación. Uno de ellos, Roberto, en declaraciones a un grupo de periodistas previas al encuentro posterior a solas con el ministro, comentó que "al ministro le recordaré que la cárcelno rehabilita a nadie".

Mayor Oreja, que estuvo acompañado en su visita por el delegado del Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles, y el responsable de prisiones, Angel Yuste, explicó en rueda de prensa que el programa afecta a unos cuarenta reclusos del centro y que su desarrollo "plantea una nueva cultura en el tratamiento de la droga en un centro penitenciario".

El ministro recordó en relación a los reclusos penados que son "personas humanas y no fábricas de coca-cola, razón por la cual ha que incidir en los tratamientos en este terreno". Por otra parte, aunque reiteró en varias ocasiones la necesidad de extender esta experiencia a otras cárceles, según una nota de Instituciones Penitenciarias ya suman 11 módulos de este tipo los que funcionan desde hace años en cárceles españolas.

Con toda probabilidad, el recluso Roberto, que se alzó como portavoz de sus compañeros toxicómanos, le diría al ministro en su encuentro privado lo que minutos antes señalaba a los periodistas: "He cometido n error, pero ahora soy tan válido como todos los demás".