"Este anuncio es otro regalo fiscal de Aguirre a los que más tienen, porque casi la totalidad del ahorro fiscal va para los bolsillos de unos pocos afortunados. En definitiva, es una rebaja selectiva de impuestos que beneficiará a los que menos necesitan estos regalos fiscales", dijo Piñedo.

Apuntó, además, que es una "auténtica hipocresía sostener que estas rebajas selectivas favorecen en general a las familias madrileñas, que serán perjudicadas un año más con la subida de los precios de la vivienda en los Impuestos de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, de lo que se aprovecha el Gobierno Aguirre".

El portavoz socialista también subrayó que este anuncio coincide con la reciente petición de la presidenta regional al Gobierno de España de más fondos para hacer frente a los gastos de los servicios públicos de competencia exclusiva de la Comunidad de Madrid.

"Es una completa desfachatez que Aguirre se invente una deuda inexistente para exigir al Gobierno central un aumento de la carga fiscal estatal y, a la vez, anuncie una disminución de la carga fiscal autonómica", sostuvo el parlamentario socialista.

Indicó que si el Gobierno central atiende la petición de la Comunidad de Madrid implicaría que "alguno de los impuestos estatales tendría que subir. Por tanto, Aguirre quiere quedar bien con las grandes fortunas de la región, pero que sea Zapatero el que pague y mantenga los servicios públicos a los que tienen derecho todos los madrileños".

Piñedo destacó que es una "falacia absurda decir que la rebaja de la recaudación va a ser compensada por un incremento del IRPF, porque la evolución del impuesto sobre la renta nada tiene que ver con el de donaciones".

"Suba o baje la recaudación por IRPF, habrá perdido la recaudación por donaciones, 8 millones de euros según el Gobierno regional", señaló Piñedo, quien indicó que la eliminación "a plazos" de algunos impuestos regionales no tiene otro objetivo que el mediático.

El diputado socialista manifestó que la prioridad de la sociedad madrileña no radica en esta "rebaja selectiva de impuestos, sino en incrementar la financiación de la Sanidad, la Educación o los Servicios Sociales y, en general, de los servicios públicos que gestiona la Comunidad de Madrid".

"Es un clamor la necesidad de mejora de la calidad de estos servicios, pero el Gobierno regional prefiere favorecer a los más ricos en vez de a la mayoría de los ciudadanos de esta región", concluyó.