En una entrevista con Servimedia, Valenciano señaló que el ciclón tropical Nargis podría ser, "si no el principio del fin" de la Junta Militar que gobierna en Myanmar, "la continuación de un fin que tiene que ocurrir de forma inminente". Un proceso en el que será fundamental la "presión de China y de India", aclaró.

Además, Valenciano recordó que China se ha visto sometida a una situación "similar", con el seísmo que sufrió el pasado 12 de mayo y, en "contraposición" a la actitud de la Junta Militar birmana, "han dejado pasar a todo el mundo, incluidos los periodistas extranjeros". Una apertura del Gobierno chino con la que "se está jugando su prestigio también de cara a los Juegos Olímpicos", añadió.

La dirigente socialista se refirió también a las recientes informaciones en las que se mantenía que el Gobierno birmano"está negociando" o "vendiendo la ayuda" que recibe, algo que calificó de "terrible".

El hecho de que la Junta Militar "siga mandando en Birmania ha dificultado muchísimo" la labor de los organismos de cooperación internacional en la zona, y "de hecho ha condenado a la enfermedad y a la muerte a cientos de miles de personas", afirmó.

En este sentido, Valenciano manifestó su esperanza en que, tras la visita del secretario general de Naciones Unidas, Ban ki-moon, "las cosas mejoren". Aunque, en todo caso, "para mucha gente la ayuda llegará tarde, sobre todo por lo que supone el no tener acceso al agua potable", lamentó.

Según la secretaria de Relaciones Internacionales socialista, el PSOE abogó desde un principio por una "intervención muy directa", ya que "la obligación de proteger" está por encima de otras cuestiones. Pero, "la comunidad internacional ha optado por la presión y no por la intervención diplomática", concluyó.