Así lo indicó López en declaraciones ante los medios en el pasillo de la Cámara Baja, después de que el presidente catalán, Pere Aragonès, cesara al ya exvicepresidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Puigneró por no haberle informado de que Junts iba a pedirle en el Debate de Política General que se sometiera a una cuestión de confianza.

“Al PSOE no le gusta meterse en conflictos de otros gobiernos o de otros partidos pero es evidente que esta es la máxima expresión del conflicto que están viviendo las formaciones independentistas, que por dar alas a sus obsesiones particulares han puesto en crisis un gobierno en un momento en el que lo que menos se necesita es inestabilidad”, apuntó.

En este sentido, destacó que el PSOE “no va a jugar nunca a la inestabilidad” y destacó que “habrá que reconducir la situación en Cataluña”. Preguntado sobre si estas palabras quieren decir que van a ayudar los socialistas a ERC a seguir con la legislatura, López aclaró que lo que dijo fue que “la inestabilidad no es buena en este momento”.