Pese a que estos asuntos no han sido puestos sobre la mesa en la campaña del PSOE para atacar a Feijóo, ya van dos días en los que destacadas dirigentes socialistas -la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Energética y el Reto Demográfico, Teresa Ribera: y la ministra de Educación y portavoz socialista, Pilar Alegría- cuestionan al presidente del PP por su antigua foto con el narcotraficante Marcial Dorado.

Fuentes de Ferraz trasladan a Servimedia que en la agenda del presidente del Gobierno y aspirante del PSOE a la reelección, Pedro Sánchez, solo figura mañana miércoles la preparación y participación posterior en el debate con Santiago Abascal y Yolanda Díaz, porque afronta “el debate como otra oportunidad más de contrastar modelos y de dirigirnos a grandes audiencias”.

Sostienen desde el PSOE que el diseño de la campaña electoral se basaba en la “combinación de mítines y formatos audiovisuales”, desde entrevistas a 'podcast', buscando la máxima eficiencia para llegar a millones de ciudadanos “en un tiempo muy corto”.

En esta visión, el debate es uno de esos hechos que, aseguran, les van “a permitir contrastar el modelo con la ultraderecha”, trasladan desde Ferraz.

“Una vez visto que la mentira es el modelo del candidato Feijóo, está claro que es un modelo que no soporta dos debates”, apuntan dichas fuentes, que señalan, a su vez, que los “sobresueldos” y “su amistad con el narcotraficante son preguntas complicadas que no quiere escuchar” el líder del PP y por eso no aparecerá por TVE.

Aprovechan la coyuntura desde el PSOE para ahondar en que Feijóo “le dejará la representación a su vicepresidente de facto, Santiago Abascal, y será él el que hable por los dos”, lo que permite a los socialistas insistir en la idea de que el PP y Vox pactarán y habrá Gobierno de coalición si les dan los números tras el 23-J.

Por otra parte, respecto a la tercera en el debate, Yolanda Díaz, el PSOE ha ignorado en su estrategia de campaña a la vicepresidenta segunda y líder de Sumar más allá de asegurar de que gobernarán en coalición.

Así, en el debate, en el PSOE apuntan a que Sánchez demostrará que les “unen muchas cosas”, además de la gestión de un Gobierno, pero que son “partidos distintos” y, como viene haciendo en la campaña, hará un llamamiento al voto útil dentro del sector progresista.